Historia General del Pueblo Dominicano Tomo III

Historia general del pueblo dominicano 499 Unidos la península y bahía de Samaná, con sus cayos y puertos, por un pe- riodo de entre 20 a 50 años, con soberanía exclusiva de los Estados Unidos so- bre los territorios y aguas. La respuesta del agente especial Frederick Seward, hijo del secretario de Estado norteamericano William L. Seward, no se hizo esperar. Insistió en que los Estados Unidos debían tener una concesión de puro y simple pago, o si esto era incompatible con la Constitución dominica- na, un arrendamiento con soberanía absoluta y sin restricciones, con dominio y poder sobre la tierra y el agua que fueran cedidas, por el término de 99 años. Sin embargo, se dejaba al Gobierno dominicano el privilegio de acceso libre y continuo a la bahía, puertos y cayos de la orilla sur de la bahía y dentro de una milla desde esa orilla. 55 La última oferta que hicieron los Estados Unidos sobre el arrendamiento, tomando en consideración la situación económica y política de la República Dominicana, fue el pago de un millón de dólares en efectivo y un millón en municiones de guerra; y se haría un avance de doscientos mil dólares, sin esperar la aprobación del acuerdo por parte de las autoridades dominicanas. Al conocerse las noticias de las negociaciones secretas, varios ministros del Gobierno dominicano se opusieron al acuerdo, al igual que el Gobierno KDLWLDQR FRQ HO FXDO &DEUDO KDEtD ÀUPDGR XQ WUDWDGR GH SD] HQ MXOLR GH en el que se consignaba que el Gobierno dominicano se comprometía a no ceder ni hipotecar a ninguna potencia extranjera ninguna de las partes del territorio dominicano. 56 Finalmente, Cabral se vio obligado a abandonar la presidencia y el país el 31 de enero de 1868. Pujols le informó al secretario Seward la terminación de su misión y le solicitó que se suspendiera el conoci- miento del tratado en el Senado norteamericano, y no dejó de agregar «Que el que suscribe tuvo el honor de negociar con Seward». 57 De este modo se frustró el acuerdo de arrendamiento a los Estados Unidos de América de la península y bahía de Samaná. L OS FILIBUSTEROS NORTEAMERICANOS Luego de los Estados Unidos haber logrado la expansión de su territorio continental con los despojos hechos a México de grandes extensiones de terre- no (Texas, Colorado, Nevada, Utah, Arizona y Nuevo México) puso su mira en el Caribe y comenzó a considerar a este mar y sus islas como su nueva zona GH LQÁXHQFLD JHRSROtWLFD

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