Historia General del Pueblo Dominicano Tomo III

Historia general del pueblo dominicano 145 estaba unido bajo un solo gobierno y si las tropas haitianas controlaban los puertos en donde podían desembarcar los franceses. Así, a partir de diciembre de 1820, el presidente Boyer envió sus agentes a la Parte Española para tratar de convencer a los criollos domínico-españoles que vendían ganado en Haití de que la unión política de la isla los favorecería, pues con la desaparición de la frontera quedarían eliminados los impuestos. Boyer se mantuvo trabajando intensamente en este plan durante todo el año 1821, desconociendo que al mismo tiempo una conspiración paralela se desa- rrollaba en la ciudad de Santo Domingo bajo la dirección de los principales funcionarios del gobierno colonial. 4 Santo Domingo pasaba entonces por un sordo proceso de agitación políti- ca inspirado en los movimientos independentistas en el continente americano. Eran comunes las comunicaciones entre algunos revolucionarios venezolanos y mexicanos con dominicanos que querían liberar el país de España. Los líderes independentistas de Santo Domingo eran en su mayoría militares y burócratas criollos que se encontraban muy desencantados con España por el abandono en que esta metrópoli mantenía a su más antigua colonia en América. Su plan era crear un Estado independiente que pasara a formar parte de la confederación de repúblicas sudamericanas que Simón Bolívar trataba de organizar bajo el nombre de la Gran Colombia. 5 /RV PRYLPLHQWRV GH VRQVDFD HVWLPXODGRV SRU %R\HU ÀQDOPHQWH FXOPLQD - ron en una declaración de independencia en Dajabón, el 8 de noviembre de 1821. A esta declaración siguieron otras en Monte Cristi, Beler y otros pueblos DOHGDxRV (Q HVDV PDQLIHVWDFLRQHV ORV SDUWLGDULRV GH OD XQLyQ FRQ +DLWt ÀUPD - URQ PDQLÀHVWRV SUHSDUDGRV HQ 3XHUWR 3UtQFLSH LQYLWDQGR D %R\HU D XQLÀFDU ambas partes de la isla. Al recibir noticias de lo ocurrido en Dajabón, el jefe de los independentis- tas en la ciudad de Santo Domingo, José Núñez de Cáceres, intentó controlar los acontecimientos y con su pequeño partido de criollos capitaleños apresó al JREHUQDGRU HVSDxRO \ SURFODPy WDPELpQ OD LQGHSHQGHQFLD HO ž GH GLFLHPEUH de 1821. Boyer utilizó esta coyuntura para invadir la parte dominicana de la isla ofreciendo apoyo al partido pro-haitiano que operaba mayormente desde Azua hasta Hincha en la frontera sur, y desde Santiago hasta Dajabón en la frontera norte. Ambas regiones sostenían un activo comercio de ganado con la parte occidental. A principios de enero de 1822, Boyer recabó la autorización del Senado haitiano y marchó con más de 12,000 soldados hacia la parte oriental llegando a la ciudad de Santo Domingo el 9 de ese año. Abrumados por el peso militar